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Cuando entraron en[a] la ciudad, Ismael, hijo de Netanías, y los hombres que con él estaban, los degollaron(A) y los echaron en la cisterna. Pero diez hombres que se encontraban entre ellos, dijeron a Ismael: «No nos mates; pues tenemos escondidos(B) en el campo, depósitos de trigo, cebada, aceite y miel». Y él se contuvo y no los mató como a sus compañeros. Y la cisterna(C) donde Ismael había echado todos los cadáveres de los hombres que él había matado por causa[b] de Gedalías, era la que el rey Asa había hecho por causa de Baasa, rey de Israel(D); Ismael, hijo de Netanías, la llenó de muertos.

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Footnotes

  1. Jeremías 41:7 Lit. en medio de.
  2. Jeremías 41:9 O mano.